El otoño es una estación de transición que trae consigo una serie de cambios en nuestro entorno y estilo de vida, pero también puede influir en nuestra salud y bienestar de diversas maneras. A medida que dejamos atrás los cálidos días de verano y nos preparamos para el invierno, es importante estar al tanto de estos cambios tanto en la naturaleza como en nuestro cuerpo. En este artículo, exploraremos algunos de los cambios más destacados del otoño y cómo pueden afectar nuestra salud y bienestar.
Índice:
- Cambios en la rutina
- Cambio en el clima
- Aumenta el riesgo de gripes y resfriados
- Cambios en el horario de luz solar
Cambios en la rutina
El otoño también puede afectar nuestra rutina diaria. Con el regreso al colegio y el trabajo después de las vacaciones de verano, tenemos que reconfigurar nuestros horarios.
Estos cambios en la rutina pueden generar estrés y ansiedad. Es importante prestar atención a los síntomas como el insomnio, la irritabilidad o el estrés, ya que se suelen asociar al cambio de estación. En esta temporada de transición, existen formas naturales de apoyar nuestra salud mental como la Ashwagandha, que ayuda a favorecer la relajación en situaciones de estrés o el Triptófano, precursor de la serotonina, que ayuda a regular el estado de ánimo.
Cambio en el clima
Uno de los cambios más evidentes en el otoño es el clima. Las temperaturas comienzan a descender gradualmente a medida que nos alejamos del calor del verano. Los días se acortan y las noches se vuelven más largas. Esto significa que es hora de sacar las chaquetas del armario y prepararnos para las temperaturas más frescas.
En lo que respecta a la salud, este cambio de temperatura puede afectar a muchas personas, especialmente a aquellos con condiciones médicas preexistentes como la artritis. Las bajas temperaturas pueden aumentar la rigidez y el dolor en las articulaciones.
La práctica de deporte y el control del peso son dos factores que pueden mejorar la salud ósea y articular. El Colágeno también puede ser una opción cómoda para mantener los huesos y músculos en condiciones saludables.
Aumenta el riesgo de gripes y resfriados
El otoño marca el comienzo de la temporada de gripes y resfriados. La combinación de temperaturas más frías y la proximidad con otras personas en espacios interiores puede aumentar la propagación de virus respiratorios. Asegúrate de tomar medidas para prevenir enfermedades como lavarte las manos regularmente y mantener la distancia social.
Recuerda que se relaciona el consumo de vitamina C con la menor duración del resfriado común, asegúrate de consumir suficiente cantidad de esta vitamina procedente de frutas y verduras o considerar el uso de complementos alimenticios de Vitamina C.
Cambios en el horario de luz solar
A medida que avanzamos hacia el otoño, también experimentamos un cambio en el horario de luz solar. Los días se vuelven más cortos, lo que significa que pasamos menos tiempo bajo la luz del sol. Esto puede afectar nuestra salud de varias maneras.
La exposición limitada a la luz solar puede llevar a una disminución de los niveles de vitamina D en el cuerpo, lo que a su vez puede afectar la salud ósea y el sistema inmunológico.
El cambio en los ritmos circadianos puede empeorar la calidad de nuestro sueño, incluso en muchas ocasiones reduciendo las horas y la calidad del descanso. La melatonina es una hormona natural que regula los ciclos de sueño y vigilia, y su producción puede ser influenciada por la cantidad de luz a la que estamos expuestos. Tomar Melatonina como complemento alimenticio puede ayudar a restablecer y mejorar la calidad del sueño, especialmente en épocas de cambios en los patrones de luz natural como el otoño.
En resumen, el otoño es una temporada de cambios notables que pueden tener un impacto en nuestra salud y bienestar. Aprovecha esta época del año para disfrutar de actividades al aire libre, explorar la belleza del paisaje otoñal, preparar tu jardín y tu cocina para la temporada, o actualizar tu armario con prendas de abrigo. Al estar atentos a estos cambios y cuidar nuestra salud física y mental, podemos sacar el máximo provecho de esta estación de transición.
