La cúrcuma (curcuma longa), también conocida como Azafrán de la India, es una especia perteneciente a la familia Zingiberaceae y originaria de la India y del sureste de Asia, que cuenta con beneficios antiinflamatorios, antioxidantes, hepatoprotectores y antiulcerosos. Actualmente es considerada como un superalimento con propiedades medicinales.
Esta especia se cultiva en zonas tropicales y subtropicales, ya que la planta requiere de un clima cálido (entre una temperatura de 30-35º), un suelo bien drenado, con sedimentos fértiles, húmedo y tipo arcilloso, así como de un pH de entre 5 y 7,5. Tras unos seis o siete meses después de la siembra, se secan las hojas y el tallo de la planta, momento en el que se cosechan los rizomas de cúrcuma. Estos últimos se hierven, se secan y, por último, se reducen a polvo.
CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA CÚRCUMA
La cúrcuma contiene alrededor de un 65% de carbohidratos, 8% de proteínas, 10% de grasa, y un 12% de agua, minerales, y vitaminas C, B1, B2, B3, B9. Por todo esto, además de ser empleada como condimento, cosmético y colorante, suele utilizarse como medicamento en remedios naturales. Para ello suele consumirse de distintos modos: en cápsulas, en infusión, en polvo, en decocción…
PROPIEDADES DE LA CÚRCUMA
- Propiedad antiinflamatoria. Es un antiinflamatorio eficaz y con menos toxicidad que los corticoides. Se emplea principalmente para tratar dolores musculares y articulatorios, artritis, torceduras, esguinces… Por esto, la cúrcuma suele ser una muy buena alternativa a los medicamentes con efectos antiinflamatorios, y resulta ser un producto muy consumido en el mundo del deporte y del ejercicio.
- Propiedad antioxidante. Los extractos de esta especia son capaces de disminuir e incluso de eliminar la producción de óxido nítrico (agente proinflamatorio). Protege a las células contra el estrés oxidativo y, además, puede reparar los daños causados por la radiación en las proteínas. Por esta razón, suele emplearse como un antioxidante natural que previene la degeneración macular, trata la psoriasis, y favorece la curación de úlceras y heridas.
- Propiedad anticancerígena y antitumoral. Gracias al poder antioxidante y antiinflamatorio de la curcumina, se conoce que existe un efecto inhibidor sobre la carcinogénesis (proceso de mutación de las células e inicio de un cáncer) en varios tipos de cáncer (hígado, páncreas, colon…). La cúrcuma interviene en tres etapas distintas de la carcinogénesis: en el momento de iniciación, en la angiogénesis y en el crecimiento tumoral.
- Propiedad hepatoprotectora. Esta especia también es un depurativo hepático que ayuda a rejuvenecer las células; resulta, pues, efectiva contra úlceras pépticas, reduce los gases intestinales, trata los cólicos y evita la indigestión. Por esta razón, la cúrcuma resulta muy beneficiosa para tratar los trastornos digestivos y los problemas gastrointestinales; así como para bajar los niveles de colesterol y triglicéridos.

BENEFICIOS DE LA CÚRCUMA
Como hemos podido ir viendo a lo largo del post, son numerosos los beneficios que nos aporta esta especia. Por eso, queremos ofreceros a continuación un breve listado con algunos de dichos beneficios:
- Alivia dolores musculares y articulares
- Regula la flora intestinal, mejora la digestión y facilita la pérdida de peso.
- Ayuda a reducir el colesterol malo y los triglicéridos.
- Combate gripes y resfriados comunes, y evita las crisis de asma.
- Alivia inflamaciones cutáneas como eccemas, psoriasis, acné…
- Ayuda en los procesos de cicatrización.
- Mejora la memoria.
- Trata síntomas de la depresión, funciona como un antidepresivo natural.
- Reduce los niveles de estrés gracias a la producción de serotonina.