Errores comunes que dificultan la pérdida de peso

Eliminar estos fallos puede ser la solución para alcanzar tu objetivo

¿Estás llevando un estilo de vida saludable y, sin embargo, no ves los cambios que estás buscando? ¡No tires la toalla! Es probable que estés siguiendo algunos consejos para bajar de peso desacertados que te impidan ver resultados en la báscula. Antes de que te desanimes y pierdas la motivación, aquí tienes algunos de los errores más frecuentes que deberías dejar de cometer si estás intentando adelgazar. Perder peso no es imposible, ¡sigue leyendo!

Seguir dietas extremas

Las dietas bajas en calorías, grasa, carbohidratos, etc. son dietas muy estrictas que, a menudo, se consideran la forma más rápida y efectiva de bajar de peso. No obstante, según los expertos, esta no es la manera correcta ni saludable de conseguir y mantener el peso objetivo a largo plazo.

• Ingerir muy pocas calorías. Se requiere un déficit calórico para poder quemar más calorías de las que se consumen y, de esta forma, adelgazar. Sin embargo, disminuir demasiado su ingesta puede ser contraproducente. Los estudios sobre dietas bajas en calorías indican que, además de provocar hambre, pueden conducir a la pérdida de masa muscular y ralentizar significativamente el metabolismo.
• Suprimir los carbohidratos. A pesar de que los carbohidratos suelen tener mala fama cuando se trata de perder peso, son necesarios para que nuestro cuerpo funcione correctamente, ya que aportan fibra y nutrientes esenciales. En lugar de eliminarlos, prioriza las opciones integrales en sobre las tradicionales.
• No comer lo suficiente o saltarse comidas. Mucha gente cree que, al hacer dieta, cuanto menos coma, antes adelgazará. Sin embargo, no se trata de comer menos, sino de comer mejor. La comida es la gasolina que nuestro cuerpo necesita para tener energía y poder quemar calorías. En vez de contar las calorías, recortar demasiado las raciones y saltarte comidas, concéntrate en tomar alimentos ricos en fibra y proteínas de calidad que ayudan a consumir un número reducido de calorías.

Con las prohibiciones o dietas restrictivas, se corre el riesgo de no obtener todos los nutrientes que nuestro organismo necesita. Los complementos alimenticios de espirulina proporcionan proteína vegetal, aminoácidos, vitaminas, minerales, ácidos grasos esenciales, enzimas, carotenoides, fitoquímicos y clorofila. La ingesta de proteínas buenas puede promover la pérdida de peso al reducir el apetito y aumentar la sensación de saciedad. Pero recuerda que siempre debes combinarla con una alimentación saludable y actividad física.

Elegir la opción reducida o baja en grasas

Cuando los alimentos procesados se elaboran con un porcentaje bajo de grasa, esta sustancia suele sustituirse generalmente por un alto contenido de azúcar, que tiene efectos perjudiciales para la salud, aumenta el apetito y entorpece los resultados del plan de adelgazamiento. Lo mejor es evitar esta sección del supermercado y combinar alimentos nutritivos, frescos y ecológicos con otros mínimamente procesados. Siempre que sea posible, opta por frutas y verduras porque, naturalmente, son bajas en grasa y altas en nutrientes.

No beber suficiente agua o beber demasiada

El agua juega un papel muy importante cuando se trata de perder peso, ya que nuestro cuerpo no puede quemar grasa si está deshidratado y puede confundir la sed con el hambre. Beber agua antes de las comidas no solo ayuda a digerir mejor los alimentos, sino que también puede reducir el apetito y, como todo el mundo sabe, es una bebida saludable y cero calorías.

Por el contrario, beber demasiada agua puede hacer que pierdas electrolitos y minerales importantes para el organismo, lo que puede conducir al mal funcionamiento del sistema inmunológico.

Hacer poco o demasiado ejercicio

La falta de actividad física conlleva problemas vinculados al sedentarismo, supone que el funcionamiento del metabolismo sea más lento y puede conducir a la pérdida de masa muscular. Aunque se recomienda entrenar entre tres y cinco veces a la semana, el deporte en exceso tampoco es saludable ni efectivo. Realizar ejercicio todos los días puede tener consecuencias negativas como no desarrollar músculo al impedir que tu cuerpo se recupere, provocar estrés severo o convertirse en una obsesión. Tómate un respiro y deja que tus músculos descansen de vez en cuando.

Centrarse en el cardio

Es cierto que el entrenamiento cardiovascular cuenta con muchos beneficios para la salud y la pérdida de peso como quemar calorías, estimular el metabolismo, mejorar el Índice de Masa Corporal (IMC), ayudar a controlar la presión arterial y reforzar el sistema inmunológico. No obstante, el entrenamiento de resistencia o fuerza es tan importante como el cardio y ayuda a quemar más calorías durante el ejercicio aeróbico. Levantar unas pesas aumenta la tasa metabólica, la masa muscular y promueve la pérdida de grasa.

Pensar a corto plazo

Los programas de adelgazamiento de corta duración que están de moda son un gran error. Llevar un estilo de vida saludable no es una tendencia pasajera ni algo que solo puedas hacer durante un par de meses, sino que es una forma de vivir que se debe intentar mantener. Seguir un ritmo estricto puede perjudicar tu salud física y mental, así que asegúrate de hacer cambios que puedan permanecer en tu rutina.

Cambia tu mentalidad para conseguir tus objetivos y mantenerlos en el tiempo

Perder peso de manera saludable también supone descansar de vez en cuando y darte un capricho cuando lo necesites. Entrenar tres días a la semana en lugar de cinco o recompensarte con un dulce no es un error, no cambiará tu cuerpo drásticamente ni arruinará lo que hayas conseguido. No intentes hacerlo todo perfecto, ya que las expectativas poco realistas pueden frustrarte y desanimarte.

Lo más importante es llevar un estilo de vida realmente saludable y establecer objetivos que puedas cumplir y mantener a largo plazo. ¡Perder peso corrigiendo estos fallos es posible! Y si necesitas un impulso, puedes ganar energía con un complemento alimenticio de maca andina.