Después de dos años con estrictas medidas de prevención por la pandemia de COVID-19, este verano las restricciones se han relajado, permitiendo a muchas personas viajar y volver a disfrutar sus ansiadas vacaciones como antes. No obstante, al esperarlas y vivirlas con tantas ganas, este año la vuelta a la rutina puede ser mucho más complicada y provocar lo que los expertos llaman «síndrome o depresión postvacacional». Los 5 consejos que proponemos a continuación te ayudarán a vencer este malestar emocional tras las vacaciones. ¡Sigue leyendo y toma nota!
Índice:
¿Qué es el síndrome postvacacional?
Tras unos días sin preocupaciones, muchas personas pueden sufrir ansiedad o síntomas depresivos por la sensación de angustia que les provoca volver a la rutina, al trabajo y a las responsabilidades. Este choque emocional, que afecta cada año al 40 % de la población española, suele aparecer durante los días previos a la vuelta de las vacaciones y suele durar entre dos y tres semanas.
Cómo afrontarlo de la mejor forma posible
Piensa en el próximo puente
Dentro de pocos meses, podrás aprovechar el puente del Pilar o el de todos los santos para hacer una escapada en otoño. De momento, puedes planear qué destino visitar y las actividades que te gustaría hacer allí para enfocarte en cosas positivas y esperar el momento con ilusión.
No dejes de hacer planes
Por muy ajetreada que sea la vuelta a la rutina, debes encontrar ratos libres para desconectar y enfrentar los días con más entusiasmo. Todavía hace buen tiempo, así que aprovéchalo al máximo como, por ejemplo, dando paseos al sol para estimular la producción de serotonina o tomando algo en una terraza con tus amigos. Fija algunas horas semanales para realizar cualquier actividad que te guste y que te ayude a liberar la tensión del día a día y mejorar tu estado de ánimo. ¡Y recuerda hacer pequeños descansos en el trabajo de vez en cuando!
Crea un ambiente de trabajo que te motive
Debido a que pasas muchas horas a la semana en tu puesto de trabajo, convertirlo en un espacio agradable te ayudará a motivarte y hará que la jornada pase mucho más rápido. Puedes transformarlo poniendo una planta, colocando un cuadro o fotos de tu familiares o llevando una vela aromática de tu olor favorito. También es importante asegurarte de que sea los más cómodo posible.
Busca el lado positivo
No te dejes llevar por los factores estresantes del trabajo que has olvidado durante las vacaciones. Intenta pensar en las cosas buenas de la vuelta a la rutina como ver de nuevo a tus compañeros, sentirte más productivo o retomar los buenos hábitos. Valorar los aspectos positivos de tu trabajo te ayudará a que la vuelta de las vacaciones sea mucho más fácil y apacible.
Plantea objetivos realistas
Marcarte nuevas metas con la llegada de septiembre es una buena forma de motivarte. Sin embargo, muchas veces son demasiadas y muy ambiciosas, frustrándote si no las alcanzas tan rápido como te gustaría. Te recomendamos comenzar por objetivos realistas que aumenten tu autoestima e ir de menos a más. Durante los primeros días de reincorporación al trabajo, reflexiona y planifica pequeños proyectos profesionales o personales que te impulsen.
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